Raro es el día en que no aparece en la página de sucesos de cualquier medio informativo algún hecho relacionado con la violencia y con sus resultados muchas veces trágicos. Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad tanto públicos como privados, son en muchos casos los receptores de esta violencia gratuita, unas veces como objetivo y otras por mediar e intervenir en los conflictos para los que son requeridos.

La violencia que conlleva el consumo de sustancias

Este aumento de la violencia, del que somos testigos en los últimos tiempos, puede ser causa de diferentes circunstancias contextuales que se produzcan en cada caso concreto, pero sí es cierto que hay un elemento que viene a ser común en todas las situaciones, el consumo de sustancias, no sólo de tráfico ilegal, sino de aquellas cuyo comercio es legal y que además se llega a hacer un abuso de ellas, todo por una búsqueda de nuevas sensaciones.

Efectos del consumo de sustancias legales e ilegales

Fiestas, espectáculos deportivos, sobre todo el futbol, entre otros acontecimientos, llevan consigo no sólo el consumo de alcohol, sino que se está pasando a ir directamente al consumo de sustancias psicotrópicas con el fin de conseguir los efectos deseados en el menor tiempo posible, entre los que destacan una total inhibición de la realidad y de la consciencia personal, transformando a las personas en auténticas bombas de relojería.

De este modo, la chispa que les haga saltar puede ser de mínima importancia para que la reacción sea desorbitada.

Pero ya no solo se trata de sustancias de tráfico ilegal, sino también de las que siendo legales se hace un abuso de ellas con el fin de conseguir unos efectos aumentados, otras veces son personas que encontrándose en tratamiento con medicación para patologías de tipo mental, las mezclan inconscientemente con alcohol u otras sustancias lo que provoca un total descontrol de la voluntad personal.

El consumo de sustancias conlleva un deterioro mental con el tiempo, siendo necesario la intervención de profesionales de la salud mental y la aplicación de tratamientos crónicos. La esquizofrenia es el resultado de un consumo prolongado en el tiempo de sustancias junto con una predisposición personal a sufrirla.

Ante este panorama, el personal de Seguridad Privada se encuentra en situaciones que son difíciles de controlar debido a la escasez de medios disponibles, así los transportes públicos , como el metro, cercanías, autobús, son elegidos por los jóvenes para volver a casa y es en éstos donde se producen enfrentamientos entre bandas, o contra el propio personal de seguridad, que en el mejor de los casos van en pareja siendo insuficientes para controlar este tipo de situaciones ante personas que se encuentran fuera de sí mostrando una violencia extrema sin sentido.

Igualmente, en las zonas de copas de las ciudades se opta por seguridad privada debiendo realizar las primeras intervenciones antes de la llegada de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, al final unos y otros son agredidos.

Los eventos deportivos, aunque principalmente es el futbol, son los que reúnen a hinchas de los mas violentos, no sólo del territorio español sino del extranjero, reciente tenemos los hechos del Sparta de Moscú y el Atlético de Bilbao, con verdaderas batallas campales que nada tienen que ver con el deporte, sino más bien, como una excusa para practicar la violencia y el vandalismo en estado puro.

A pesar de los dispositivos de seguridad, finalmente Fuerzas y Cuerpos de Seguridad y Seguridad Privada acaban siendo agredidos, si bien es cierto que los Cuerpos de Seguridad cuentan con unidades especializadas para el control e intervención con grandes masas, el personal de seguridad privada no cuenta ni con medios, ni con formacion para afrontar este tipo de situaciones.

Soluciones

La autoridad de un policía o un vigilante de seguridad en determinados eventos o en las madrugadas después de una noche de fiesta y desenfreno, no son suficientes para controlar este tipo de hechos, ya que la realidad queda mermada produciéndose actos de violencia extrema, vandalismo y en muchos casos con resultados trágicos , donde en su posterior juicio aparecerá de fondo por parte de los abogados defensores “se encontraba bajo los efectos de sustancias y alcohol“ en busca de una eximente que rebaje la pena.

Por tanto, si queremos soluciones debemos de trabajar en los siguientes frentes:

• Organización real de los servicios de seguridad en base a los riesgos y con los medios y formacion necesarios. del personal de seguridad que deba cubrir los servicios.
• Cerrar los eventos deportivos a todo tipo de hinchas violentos, tanto del territorio español, como de aquellos que deseen trasladarse a territorio español.
• Mayor protección jurídica de los agentes tanto públicos y privados y menos eximentes por encontrarse bajo los efectos de sustancias, ya que, si el consumo ha sido voluntario, no puede eximirse posteriormente de sus consecuencias, al igual que un conductor que conduce ebrio.

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Todos sabemos que la seguridad es una necesidad a nivel global y particular. La definición de seguridad se describe como la ausencia de peligro, daño o riesgo, o como una sensación de confianza. Pero nadie está seguro en la actualidad y aunque el Estado es el garante de la seguridad pública y el máximo responsable a la hora de evitar las alteraciones del orden social, nunca es suficiente ni la completa solución.