La importancia de la formación en terrorismo toma más sentido en la actualidad. Acontecimientos que han marcado España en esta materia, nos hacen preguntarnos si estamos preparados o no como país.
Atrás quedo el terrorismo de ETA y de otros grupos menos activos como los GRAPO. ETA sembró el terror en España largos años dejando tras de si un reguero de sangre con muertes de inocentes que nada tenían que ver con unas reivindicaciones que como cualquier organización civilizada debían de haber realizado democráticamente.
Las fuerzas y cuerpos de seguridad fueron la mejor arma con la que la sociedad pudo acabar con este terrorismo, gracias a su formacion y preparación que fueron perfeccionando con el tiempo.
Pero desde hace unos años cuando el terrorismo nacional parece que había sido aniquilado aparece otro de espectro internacional y al que España ha sacudido duramente en dos ocasiones y que a pesar del nivel de alerta de los cuerpos de seguridad en la segunda ocasión consiguieron su fin.
Parece que la sociedad actual no llega a conseguir estar tranquila , cuando una amenaza se consigue neutralizar otra aparece y de mayor envergadura, cuando sucedieron los atentados de las torres gemelas en New York, en España como en otros países del entorno se veía como algo lejano , lo que da cierta tranquilidad al ser humano de que aquello que sucede lejos de nosotros no nos va a llegar, pero con el atentado terrorista del año 2004 en atocha con casi 200 personas fallecidas la cosa cambió, España esta en el mapa y muy visible para esta ola de terrorismo islámico o yihadista cuyo objetivo es crear el mayor mal posible en aquellos países y sociedades a los que consideran sus enemigos, sus reivindicaciones ni siquiera ellos las conocen.
Se ha pasado de un combate en tierra hostil, Siria, Afganistán, Irak etc.… a un “combate” en tierra pacifica donde la mejor arma de que se dispone es el de anticiparse a los hechos, no se trata solo de cómo actuar cuando suceden los acontecimientos sino sobre todo de neutralizar y prevenir que cualquier acto terrorista consiga su objetivo.
El año pasado el atentado en las Ramblas de Barcelona con 14 personas fallecidas y varias decenas de heridos sembró el terror con el autor huido y un nuevo ataque en la misma noche en Cambrils en donde fueron abatidos los terroristas por las fuerzas de seguridad, haciéndose mas patente la necesidad de colaboración de todas las fuerzas y cuerpos de seguridad y una formacion adecuada para todos dependiendo del nivel operativo en el que desarrollen su trabajo.
Por tanto las patrullas de seguridad ciudadana y personal de seguridad privada tendrían un papel primordial como primeros intervinientes ante un atentado, pero también pueden facilitar por su acercamiento a la población, información muy valiosa para las unidades de información e investigación, éstas estarían en otro nivel operativo con un trabajo en la clandestinidad controlando núcleos activos en donde se puedan desarrollar actividades terroristas, bien de captación o de células dispuestas a atentar y que llegado el caso son las unidades especiales la que proceden a la neutralización de estas y su puesta a disposición judicial.
Asi la lucha contra el terrorismo que nos amenaza actualmente no es cosa de cuerpos especiales únicamente sino de todos los que de pertenecen a la seguridad, policiales, militares y seguridad privada , y por ello todos deben de recibir una formacion que les ayude a como colaborar eficazmente en esta lucha que a todos incumbe, incluso los propios ciudadanos deben de saber donde dirigirse en caso de que tengan la más mínima sospecha, la colaboración ciudadana es imprescindible tanto para este tipo de hechos como de otros.
La preparación de medidas y dispositivos de prevención y seguridad para que, si llegado el caso se produce un atentando poder minimizar los daños y conseguir neutralizar a los terroristas en el menor tiempo posible junto con la rápida atención a personas heridas, deben ser establecidos por las juntas locales de seguridad con la participación de todos los cuerpos implicados y autoridades competentes.
Lo peor que puede pasar es que en caso de producirse un atentado las propias fuerzas y cuerpos de seguridad actúen sin coordinación alguna unido al pánico que un hecho de este tipo produce en la población.
Las escuelas de seguridad de los cuerpos de seguridad van incluyendo en sus planes de formacion, cursos para tratar el fenómeno yihadista, dependiendo, como comentaba más arriba, del nivel operativo a los que vaya dirigido.
Pero también existe una amplia formación en terrorismo ofrecida en el ámbito de la formacion privada o concertada, ya que no siempre es posible acceder a aquellos cursos que nos interesan y que por nuestra deformación profesional deseamos formarnos teniendo en cuenta que la lucha contra el terrorismo no es algo para “engordar” nuestro currículo sino para evitar verdaderas masacres.
La colaboración y coordinación entre cuerpos y fuerzas de seguridad siempre, debe sumar.
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