Incendios Forestales, con la llegada del verano y las altas temperaturas comienza una época de alto riesgo para nuestros montes, todos los años tenemos que lamentar incendios forestales por toda la geografía española, ninguna zona está a salvo de sufrir estos devastadores fuegos y es que en la mayoría de los casos la mano del hombre está detrás, bien de modo voluntario, como de modo imprudente, sumándose a otro tipo de causas de tipo natural como los de origen meteorológico entre otros. Daños cuantiosos e incluso víctimas mortales en algunos casos han llevado a las administraciones competentes a destinar recursos tanto materiales como humanos para la lucha contra el fuego.
Pero hay una cosa clara ante este tipo de incendios forestales y es que no solo se trata de disponer de los medios y recursos para hacer frente a los fuegos sino de conseguir realizar una prevención eficaz para que no se lleguen a producir o en su caso detectarlos lo más pronto posible para su rápida extinción.
Para ello se hace necesario un proyecto que trabaje todos los factores causantes de los incendios forestales tales como:
Hoy día podemos decir que por parte de las administraciones competentes se trabaja en los puntos expuestos y en lo que a vigilancia se refiere aunque pueda parecer una misión imposible por las grandes extensiones de terreno a controlar, la tecnología ha ido avanzando aportando soluciones para la prevención de incendios forestales en este medio al igual que lo ha hecho en el medio urbano.
Y es que sin la aportación de la tecnología se hace difícil conseguir planes preventivos eficaces, aunque por supuesto conllevan importantes inversiones económicas pero que son perfectamente amortizadas al evitar incendios y el despliegue de recursos que estos conllevan.
Estas permiten detectar con mayor rapidez los focos incipientes de incendios y, por tanto, anticipar la intervención del operativo de extinción de incendios para minimizar los daños y la superficie quemada.
Pueden controlar hasta 100.000 hectáreas, lo que facilita el control de estos bastos terrenos.
Las cámaras térmicas, instaladas en las zonas más sensibles son capaces de girar 360º de forma continua, haciendo barridos, del exterior hacia el interior, en un radio de hasta 15 kilómetros.
Cuando los dispositivos detectan un cambio importante de energía, lo cual se traduce como un cambio de temperatura, trasmiten una señal automática de alarma y mediante su sistema de georreferenciación permite obtener datos precisos de la ubicación del punto de alarma.
Además, tiene un sistema avanzado de algoritmos de reconocimiento que discrimina las falsas alarmas.
Finalmente, el sistema maneja cartografía y visualización de los datos meteorológicos en tiempo real.
La cámara de video CCTV registra la imagen con gran calidad en caso de que el sensor térmico detecte un posible foco de fuego.
Estos sensores hacen posible una detección mucho más rápida de los cambios de temperatura y, por tanto, permite actuar de una manera más precisa y rápida sobre el foco del incendio.
Hay un dicho que dice que mas vale prevenir que curar, y en estos casos nada mas lejos de la realidad, la prevención debe ser el pilar fundamental para luchar contra los incendios forestales dado las grandes perdidas medio ambientales que suponen y los costes económicos que llevan aparejados tanto para extinguir los incendios como para reforestar las zonas quemadas.
Las administraciones han comenzado a reaccionar realizando inversiones en materia preventiva y concretamente mediante la utilización de las últimas tecnologías aplicadas a la seguridad a la vista de que el coste de estas inversiones no es comparable ante las catástrofes que pueden llegar a evitar.
Los medios tecnológicos junto a recursos humanos cualificados son el camino a seguir en esta lucha.